Duki reventó Bogotá con su show del 21 de agosto

De las batallas de freestyle a los grandes escenarios, Duki llego nuevamente a la capital.

Foto sacada de Rolling Stone

El trap argentino dejó huella en Bogotá. Duki se presentó en la capital el pasado jueves 21 de agosto, en uno de los conciertos más esperados del año, y no decepcionó. Desde temprano, miles de fans llegaron al Movistar Arena con outfits listos para gritar a todo pulmón himnos como Givenchy, She Don’t Give a Fo o Goteo.

La energía fue explosiva: luces, fuego, visuales intensos y un Duki que se entregó al público colombiano como pocas veces. El artista, considerado pionero del trap en Latinoamérica, demostró por qué pasó de rapear en batallas de freestyle en plazas a llenar estadios en todo el continente.

Mauro Ezequiel Lombardo, mejor conocido como Duki, es un rapero y cantante argentino que se ha convertido en la figura más importante del trap en Latinoamérica. Nació en Buenos Aires en 1996 y comenzó su carrera improvisando en batallas de freestyle en plazas, especialmente en el famoso torneo El Quinto Escalón, donde se ganó el respeto de la escena urbana.

Con el tiempo, pasó de rapear en la calle a llenar estadios. Su tema She Don’t Give a Fo fue el que lo catapultó a la fama, y desde ahí no ha parado: tiene colaboraciones con Bad Bunny, Nicki Nicole, Bizarrap, Emilia y hasta cantó con YSY A y Neo Pistea formando el mítico Modo Diablo, grupo que marcó la historia del trap argentino.

En redes, los asistentes no han parado de compartir videos del show, que fue tendencia durante toda la noche. Para muchos, este concierto confirmó que Duki es más que un cantante: es la voz de una generación que se identifica con sus letras y su estilo crudo pero auténtico. Bogotá ya lo esperaba con ansias y la ciudad respondió con euforia.

Hoy, Duki es considerado un referente cultural para una generación que lo sigue no solo por su música, sino porque representa esa mezcla de rebeldía, autenticidad y superación. Con millones de oyentes en Spotify y una carrera que ya es global, sus conciertos son sinónimo de fiesta y desahogo para sus fans.